noviembre 24, 2007

Globalización

4.20 am. Suena el teléfono. Me despierto sobresaltada, pensando que algo terrible debe haber pasado, agarro el tubo de un manotazo.

- QUé pasó??!!!

Escucho la voz de mi madre, incapaz de calcular la diferencia horaria desde el otro lado del océano que dice, angustiada

-Es que estaba preocupada por vos.

(Bueno, por lo menos no se murió y todavía puede marcar un número de 10 dígitos. Sus facultades intelectuales deben estar intactas. Pero se preocupa por mi a las 4 de la mañana? No se podrá preocupar en un horario más como de 9 a 6?)

- Por mi?

- Es que estaba mirando la televisión y vi que agarraron a un tipo que mataba chicas.

(Yo tendré tipo de víctima de asesino serial? No soy muy angelical, no daría el physique du rôl en las fotos...)

- Ah.

- Por eso, tené cuidado, vos que andás por ahí de noche. Pasan tantas cosas...

(Sí, pasan muchas cosas, la invasión a Irak, el calentamiento global, Macri gana la ciudad, hay niñas que lloran madera y sin ir más lejos, ahora a María Amuchástegui se le dió por cantar. Ahora, eso de "por ahí de noche..." ¿Qué pensará mi madre que hago en mi tiempo libre?)

- Y eso salió en la tele allá? Dónde lo viste? Dónde lo arrestaron?

- En Londres.

Lo que se dice una preocupación global.

3 comentarios:

Tunnard dijo...

Che! Eso de cargar a las madres es mi idea. Pará de robar de mi blog!

Artemisa dijo...

Mirá, yo no sé vos cuándo empezaste tu blog, pero yo a mi madre la vengo sufriendo desde que nací! Tengo para tres blogs y una miniserie.

florchusk dijo...

jajaja! esta es mi cronica favorita!
besos desde Bolivia